Ayer me fui a dormir con esta idea en la cabeza. Además super clara. Tengo un par de borradores en el blog con cosas que os quiero contar sobre la cultura que consumo, ya sean juegos de mesa, libros, videojuegos, series o películas, un poco de mi día a día, si es que hay algo digno de comentar, y cosas. En general no sé si es contaros o contarme. Al final un blog no deja de ser un espacio para mí, para hablar de mis gustos y, con suerte, echar la vista atrás cuando crezca y seguir disfrutando de las entradas.
Y, por experiencia, sentir mucha vergüenza.
Pero he decidido volver a intentarlo. Sin constancia y sin presiones, comentando lo que me apetezca cuando tenga un momento antes de ir a trabajar o cuando llego a casa y el gato está en mi regazo.
Así que, como parece ser que trabajo poco con juegos de mesa, os voy a hablar de ellos. De cinco juegos que se parecen al videojuego de moda: el Among Us.
Portada de Among Us (x) |
Among Us guarda similitud con los juegos de mesa de roles ocultos porque se basa en la misma mecánica. En engañar a tus rivales y tratar de darle la vuelta a la tortilla cuando te pillan en una situación comprometida. A mi estos juegos me agobian mucho cuando soy impostora porque soy malísima, pero eso no hace que no los conozca o los haya jugado, me gusten más o menos.
Aquí os dejo cinco recomendaciones para quienes queráis conocer juegos de este estilo que jugar con amigos.
0 - Hombres lobo de Castronegro
El pacto, versión completa del juego (x) | |
1 - Secret Hitler
El objetivo del juego para los liberales es alcanzar cinco políticas liberales en la mesa o matar a Hitler, mientras que el de los fascistas es, o lograr seis políticas liberales en la mesa, o conseguir que Hitler sea canciller.
Si os gusta la parte de los roles ocultos más psicológica, en la que analizas cada fallo del rival al milímetro, este es vuestro juego. Se trata de un juego en el que un segundo de más mirando las cartas puede significar tu nombramiento como fascista (o es que tal vez jugamos mucho a este juego). Los debates, la forma en la que endulzas tus palabras para no parecer fascista... se trata de un juego en el que la estrategia juega un papel principal, pero tienes que saber mentir muy bien y deducir otro tanto para ganar la partida. Llega un punto en el que ya no sabes en quien confiar y acabas con ganas de lanzar la mesa por los aires y matar a todo quisqui (y por eso ya no juego...)
El juego es muy bueno como juego de roles ocultos, porque es la esencia principal. Tienes que hacer muy bien tu papel para que no te pillen.
Además otra de las ventajas de este juego es que es gratis. Sí, gratis. Podéis acceder a la página oficial para descargaros las reglas y los archivos e imprimirlos en vuestra casa. No necesita más. Podéis encontrar también copias por Amazon y Aliexpress o maquetarlo a vuestro gusto. También podéis encontrar otros formatos de juego por internet, por si el tema Hitler no os atrae. Secret Voldemort, Secret Vader... Todo es buscar.
2 - Battlestar Galactica
El juego tiene dos fases. En la primera se reparten unos roles y llegan los primeros zylon, pero en la segunda, al repartir roles puede ser que un humano, que lleva medio juego en el bando humano, cambie de grupo y ahí se líe la marimorena.
El juego cuenta con mucha variedad de acciones y posibilidades, los saboteadores además pueden revelarse como zylon para realizar acciones desde el bando zylon y complicar todavía más la partida, y los humanos pueden encerrar o quitar a los zylon del cargo de poder (antes de que se muestren como zylon). Es un juego más compejo de lo que puede ser el secret hitler y es probable que no dependa tanto de la psicología de una acción (escoger dos cartas) como de un sinfín de acciones que pueden delatarte más o menos.
Además, lo gracioso es que más de una vez he escuchado gente que se olvidaba de añadir los zylon a la partida y aún así han perdido y se han liado a acusaciones. Un juego muy divertido y recomendable.
3. Secrets
Los agentes cuentan con un valor y además activan una habilidad especial que puede beneficiar o no al jugador que la use. En tu turno robas dos cartas y le ofreces una de las dos a otro jugador, del que puedes o no conocer su identidad. El jugador sabe entre qué dos cartas le estás haciendo escoger, pero no cuál de las dos, y dependiendo de sus intenciones, decide cogerla o no. Si no la acepta, te la quedas tú y la puntúas tú.
La gracia de este juego depende en las habilidades especiales. Al comienzo del juego todos podemos ver la identidad propia y la del jugador a nuestra derecha (o izquierda, la lateralidad y yo no nos llevamos bien). Después el juego comienza y a medida que se reparten las cartas se activan las habilidades especiales. Cartas que permiten cambiar tu identidad secreta con una que sobra en el centro de la mesa, que te permiten observar la identidad de un jugador a tu elección o cambiar en secreto la identidad de dos jugadores de la mesa. El resultado es que puedes llegar a jugar sin saber exactamente para qué grupo juegas y ganar por accidente. Perfecto para los que disfruten de un sano caos.
El juego termina cuando un jugador tiene 5 cartas encima de la mesa, que representarían a sus agentes. En ese momento se cuentan los puntos y gana la agencia con mayor suma de puntuaciones o el hippie, si ha conseguido la menor puntuacion individual de la mesa.
Lo bueno de este juego de roles ocultos es que no mete tanta presión al jugador, incluso aunque la parte de deducción y debate sea interesante. Es un juego al que puedes engañar a gente como yo, que lleva mal los juegos de mesa de esta temática, y aún así os lo vais a pasar bien sacando vuestras conclusiones y generando caos en la mesa.
4. Bang/Samurai Sword
Como os digo he jugado un montón al bang. Me gusta mucho porque sigue siendo un juego de roles ocultos pero la mecánica de votación y psicología está más diluida y las cartas con las que juegas en la mano tienen también un peso importante en la partida. El sheriff es el que está más jodido y tiene que pensar bien a quién ayuda (pierde todas sus cartas si mata por error al ayudante del sheriff), pero a pocos jugadores sólo tiene que matar, sin importar a quién.
Contaremos además con un personaje con habilidades especiales que podrán o bien robar al quedarse sin cartas, usar las cartas de esquivar como bala o las balas como esquivar, disparar tanto como quieran... y más.
La mayor pega que tiene el bang es que si la partida dura media hora, pueden matarte en los primeros cinco minutos y te quedas mirando como un idiota el resto de la ronda. Eso lo solucionan en Samurai sword, un juego igual excepto que en vez de vaqueros son samurais. En ese juego al quedarte sin puntos de vida robas honor a un jugador y al siguiente turno puede volver a jugar como si nada hubiera pasado, aunque con un poco menos de honor.
La realidad es que este juego se convierte en un juego un poco más psicológico y complejo en comparación al bang y soluciona muchos de los fallos que el juego de vaqueros tiene. Y, aunque en mi corazón siga disfrutando de la edición del viejo oeste por el factor nostalgia, creo que este juego merece más la pena si estáis dudando entre uno u otro.
5. Saboteur
En este juego seremos enanos buscando un tesoro en una mina, con dos cartas de roles. Buscadores y Saboteadores. Ya veis, se volvieron locos con la originalidad. En la partida habrá una carta de salida y tres cartas de tesoro (dos piedras y una pepita). El objetivo de los saboteadores es que se acabe el mazo de cartas sin haber alcanzado la pepita de oro, mientras que los buscadores deben tratar de alcanzarla.
Durante el juego iremos sacando cartas de mapa con las que ir trazando el camino hacia el tesoro. Además existen algunas cartas que nos permitirán buscar, dentro de las tres cartas finales, cuál es la que contiene el oro, o que permitirán o impedirán que sigamos cavando. De ese modo el saboteador puede impedir el trabajo de los enanos o estos, si han pillado al saboteador, pueden intentar impedir que les lleve por donde no es.
La ronda termina una vez se ha acabado el mazo de cartas sin llegar al tesoro, o si los jugadores logran llegar a la pepita de oro. En ese momento buscadores o saboteadores se reparten unas cartas de pepita y se inicia una nueva ronda. Al final del juego quien haya conseguido más pepitas gana la partida.
Como os digo este es un juego muy rápido y fácil de aprender, que no requiere de mucho espacio con el que sin duda os lo vais a pasar muy bien entre deducir y tratar de sortear las trampas que pone el saboteador. Además su caja no es muy grande, por lo que lo podéis llevar a cualquier sitio.
Sin duda el mundo de los juegos de mesa es inmenso y existen tantas opciones de juegos de mesa de roles ocultos que podríamos dedicarles varias entradas al respecto, pero en algún punto tenía que poner el límite (aunque los comentarios sirven para seguir expandiendo la lista, así que...¡Bienvenidos sean!). También es interesante comentaros que no, no he puesto la lista en orden de preferencias, pero si tuviera que escoger un juego de la lista lo tendría difícil. Por la importancia que tiene la psicología y el debate me quedaría con Secret Hitler. Por factor nostalgia, seguramente Bang.
¿Y vosotros? ¿Conocíais alguno de estos juegos? ¿Qué otro juego de este estilo recomendaríais?
Existen innumerables juegos de mesa para todos los gustos y aventuras. Es imposible no encontrar uno que te enamore y con el que querrás pasar tiempo con tus familiares y amigos.
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